miércoles, 6 de abril de 2011

SILENCIO POR FAVOR O ESE SILENCIO QUE MATA

El silencio, frente a lo que instintivamente nos inspira, forma parte del propio lenguaje y es tan variado o mas que el lenguaje mismo. Desde que Pablo Neruda, escribiera aquello de: “me gustas cuando callas porque estas como ausente”, incluso para definir una situación de cariño se puede utilizar.

Claro que hay muchas clases de silencio. Hay un silencio de respeto, por ejemplo el que se les brinda a los muertos, ay! cuantos minutos de silencio no habremos guardado. Hay un silencio de indiferencia, como me lo dice mi madre, “no hay mayor desprecio que no hacer aprecio”, es de decir  (-)  mas (+) = 0, ósea, silencio.

Luego esta el silencio cómplice, de esta clase sabemos también demasiado, en cuantas ocasiones el silencio deja hacer y se convierte en aliado de las realidades injustas. Cuantos silencios ayudaron en muchas guerras, el silencio ante el nazismo se convirtió en cómplice de los mismos campos de concentración. Incluso en situaciones mas cotidianas, en temas mas domésticos, el silencio no es otra cosa de “dejar hacer”, consintiendo lo que se haga.

En muchas ocasiones asimilamos silencio con “políticamente correcto”, puede ser, si por tal entendemos no complicar políticamente lo que es correcto, o lo que no es incorrecto, da lo mismo.

Mario Benedetti hablaba del silencio solidario con los demás, bueno mas que eso, una forma de pedir que se deje de dar la brasa al otro cuando decía que “ el silencio es un homenaje al prójimo”, no deja de ser una forma refinada de mandar callar, que me tienes hasta los cojones.

Los silencios, como en la música, forman parte del ritmo del discurso, de la música misma, igual ocurre con los otros silencios, pero corren un peligro, que si se prolongan demasiado se conviertan en silencios absolutos, y eso ya seria el silencio de los corderos, y a mi ese me da miedo

1 comentario:

Jesús Herrera Peña dijo...

Fermín, ese cartel que ilustra tu artículo tiene guasa. Guasa y grasia repajolera.
Me gusta que se escriba como se habla. Al menos, en escritos informales que van dirigidos al pueblo llano. Y no es de coña; lo digo con seriedad.
Por eso, yo hubiera escrito, mejor, de esta guisa, al margen de acentos y de bes y uves:
"FABO DE GUARDA ZILENSIO PA QUE DEJCANCEN LAG DEMA PERZONA"

De verdad, no te exagero. Me gusta mucho el idioma andaluz y aunque no lo manejo bien —a la hora de escribirlo— sí presumo de que lo entiendo bastante bien. (Te invito a que pinches en el hipervínculo para que sepas lo que siento por el idioma andaluz).
Lo que pasa es que tengo un lío con eso de la 'c-z' con que se habla en Sevilla y la 'ese' con la que se habla en Cádiz. (¿O es a la viceversa?).

Saludos,