Columna de opinión publicada el 5 de Septiembre en VIVA CADIZ
El lunes día 3 salió a la luz, fundamentalmente a través de Blogs personales y de la redes sociales, una reflexión firmada por 50 militantes socialistas de todo el estado, entre los que me encuentro, en torno al papel de oposición ejercido hasta ahora por el partido socialista y su modelo de liderazgo. Reflexión, que ni va contra nadie, ni mucho menos a favor de nadie.
Simplemente es una reflexión, que parte del desafecto general de la ciudadanía hacia la política, hacia los partidos políticos y hacia sus líderes en general. Que constata que muchas veces, en la practica, las diferencias entre discursos entre los dos grandes partidos es casi nula, y sobretodo, que tenemos que reencontrarnos como socialistas con nuestra base social, devolver a los ciudadanos la esperanza.
Convencido de que, o en este Pais somos capaces de demostrar que solo desde la Política con mayúsculas se tienen y se pueden solucionar los graves problemas que acogotan a la ciudadanía . Que si bien ningún partido es ajeno a este desafecto, solo desde la izquierda se puede variar este panorama, porque como se ha demostrado en múltiples ocasiones, la apatía social, el desapego hacia la clase política, el quedarse en casa, solo beneficia al poder económico y a su representación política que es el Partido Popular. Estas son las claves, que me/ nos motivaron a firmar el documento de reflexión que llamamos Por un PSOE útil.
Para andar en esta dirección, creo/creemos que es necesario un discurso político claro y diáfano como izquierda, como socialistas. Un discurso al lado de los mas afectados por la crisis, al lado de cada vez mas ciudadanos y ciudadanas, que están siendo machacados por medidas que forman parte de una estrategia ideológica, al lado de la gente porque los socialistas formamos parte de esa gente.
Pero esto no solo lo podemos hacer desde un discurso teórico, por "dirigentes desde sus despachos", este discurso nuevo, comprometido con nuestra base social, solo seremos capaces de hacerlo, trasladarlo a la sociedad con credibilidad, si somos capaces de entusiasmar a nuestra propia militancia. Si somos capaces de que los liderazgos se hagan mas horizontales, mas compartidos. Si en definitiva somos capaces nosotros mismos de adecuar nuestra propia organización al siglo XXI.
Lo decía al principio, contra nadie, a favor de tod@s.
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