De primarias y referéndums

Pocas veces un político en la "cumbre" decide emprender el descenso, no a los infiernos, a la vida normal, a recuperar su ciudadanía plena. Sólo por eso, el Presidente de la Junta Pepe Griñan merece todos mis respetos, y por qué no, también mi cariño.

Dicho esto, que me parece importante dejar claro, nos enfrenta como progresistas, como gente de izquierda en Andalucía, ante un fenómeno importante que el mismo Griñan plantea en su anuncio: la necesidad del cambio generacional. En otra coyuntura, este cambio generacional no supondría mayor problema que un cambio de personas, de equipos y punto; pero hoy la ciudadanía exige, después de un largo periodo de turbulencias sociales, mucho más que un rejuvenecimiento en las personas, también quiere ser protagonista de todo lo que puede determinar su realidad.

Podemos actuar de muchas formas, sin duda. Podemos decir a los andaluces y andaluzas que este no es su problema, que aquí, se decide de puertas para adentro quién aspirará a presidir la Junta dentro de unos años. Se puede decidir de la persona designada que su único mérito está el "controlar" -y muy bien- los pasillos de los congresos, que puede sumar muchos cargos orgánicos e institucionales sin problemas, que desde su tierna juventud se instaló en el "aparato" y de él no se ha bajado, y muy poco más. Pero eso sí, es de nuestra confianza.

También hay más opciones. En nuestro entorno cultural, los partidos progresistas (en Francia por ejemplo), los ciudadanos, afiliados o no al PSF, tuvieron la oportunidad de elegir a Hollande como candidato a la Presidencia de la República. En Italia también se han confeccionado las listas completas, y su orden, del mismo modo. Ahí está el reto y la apuesta. ¿Nos abrimos a la sociedad, a nuestra base social, que sabe y que quiere decidir desde el primer momento? ¿O nos mantenemos en los esquemas y conceptos del partido del siglo pasado?

Creo que la disyuntiva está realmente ahí. Creo también que estos días, para intentar reconstruir y descodificar toda la información que nos llegará, podemos simplificar diciendo… “bueno, estos son los de la Carme y estos los de Alfredo”, o “estos son los griñanistas y estos los pizarristas”. Sería un error. No funciona la cosa así, es mucho más complejo.

.........artículo completo en el Diario Progresista Andalucía